Usos de la piedra en Freginals
Por la zona decimos construcciones de piedra en seco. Se ven secas, pero no lo están. Están llenas de sudor. Mucho sudor escondido entre sus rendijas. Reconozcamos y valoremos el esfuerzo de nuestros antepasados.
La pendiente es fuerte. Los muros tienen que ser altos para que el agua no arrastre la tierra de labor.
No es un muro de piedra. Miradlo bien. Es un tratado de ingeniería. Ingeniería pura. Sin ningún ordenador ni cálculos matemáticos. Sólo las manos y el saber hacer. La curva, la inclinación, las piedras bien puestas. Está en un barranco, donde el agua baja con fuerza. El tiempo todo lo madura. Pero aquí ha resistido y resistirá mucho tiempo.
No hay que dar grandes rodeos para recoger la cosecha. Lo pondremos fácil.
Más originales. Escaleras "al vuelo".
Todo un lujo. Me las hizo mi padre.
Gavillas de maleza que también abundaba.
Una cisterna al aire libre con el recogedor de losas de piedra (segunda foto)
O de una cisterna también, pero resguardada dentro de la "barraca" con el recogedor natural que se ve en la tercera foto.
Después del trabajo, con todo el derecho del mundo, toca descansar. Aquí podían comer a la sombra en verano, con los pies al sol en invierno, echar la siesta. Descansar.
Hilera de picas de piedra donde el ganado bebía el agua procedente de esta fuente, hoy tristemente desaparecida.
Todo esto sucedía alrededor de esta maravillosa montaña que da nombre a la comarca
EL MONTSIÀ
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